Leo en The Independent un artículo de Richard Garner, que es bastante estimulante: «el español ha sustituido al alemán como segundo idioma más popular aprendido en las escuelas británicas». El tema es importante si nos atenemos al pragmatismo inglés en estos temas.

Y es que pese al peso económico de Alemania en Europa y su influencia en Europa Oriental, nuestra lengua es un activo educativo con suficiente fuerza como para desplazar al alemán de los centros educativos británicos. Las cifras muestran un 75 por ciento de las escuelas estatales ya ofrecen español en comparación con el 67 por ciento que ofrece el alemán.

He insistido decenas de veces en que nuestro país no ha aprochado el binomio Internet – lengua española, quizás este tipo de noticias propicien una conciencia mayor sobre el potencial de nuestro idioma.

En la misma noticia -algo que tampoco nos debería pasar desapercibido- es que número de escuelas estatales británicas que ofrecen mandarín como una opción de idioma a sus alumnos se ha triplicado en los últimos dos años pasando de ofrecerse en la proporción de 1:25 a más de 1:7. ¿Tomamos nota?